Según el último informe de la OCDE sobre cuidados de larga duración (LTC), en muchos países desarrollados envejecer con dignidad se ha convertido en un lujo. Y eso debería escandalizarnos.
Más de 600.000 personas, principalmente mujeres, trabajan en este ámbito bajo el Sistema para la Autonomía y Atención a la Dependencia (SAAD), pero muchas sufren precariedad laboral, salarios bajos y condiciones desfavorables.
El CEO de SUPERCUIDADORES valora la recién aprobada Ley de Dependencia y Discapacidad, que debe pasar ahora su trámite en el Congreso de los Diputados.
Aborda factores como la astenia primaveral, el aumento de luz solar, los cambios de temperatura y las alergias estacionales, que pueden influir significativamente en esta población.
El estudio ‘Impacto de la enfermedad crónica en mujeres mayores cuidadoras’ revela que estas mujeres enfrentan una carga física y emocional significativa, afectando su salud y bienestar.
