Con un enfoque integral, estas residencias ofrecen cuidados especializados para personas con Alzheimer, promoviendo un envejecimiento activo mediante programas de estimulación cognitiva y terapias no farmacológicas.
Un estudio pone de relieve que “la música favorece el desarrollo emocional, la calidad de vida y la inclusión social, aportando momentos de bienestar y relajación”.