Con motivo de las convocatorias de huelga que los sindicatos ELA y LAB están promoviendo en las residencias privadas de Bizkaia a la Asociación Empresarial de Gestores de Centros Asistenciales (GESCA) le preocupa la utilización política y sindical que se hace de las residencias de mayores.
Explica que "han sido los sindicatos quienes se han levantado de la mesa de negociación del convenio tras plantear dos reivindicaciones: La equiparación de las condiciones laborales con el personal que trabaja en los centros de gestión pública, funcionarios/as y que el departamento de Acción Social de la Diputación Foral de Bizkaia (DFB) se siente a negociar el convenio. Recordamos que se trata del marco laboral entre empresas privadas, y las personas que trabajan en ellas".
Además, esta asociación vasca apunta que "la exigencia de publificación que las fuerzas sindicales hacen constantemente, no tiene ningun sentido" y recuerda que más del 80% de los centros son de titularidad privada, es decir han sido promovidos por entidades privadas.
También que, mediante diversas fórmulas de colaboración público-privada, "en Bizkaia se ha podido crear una tupida Red de residencias que aglutina a algunas de titularidad pública y otras de titularidad privada, de manera que, cuando una persona reconocida como dependiente, tiene derecho, y desea acceder a una plaza residencial, tiene libertad de elección entre un amplio abanico de opciones".
GESCA subraya que "es FALSO que las patronales vayan a recibir de la DFB 255 millones de euros. Esta cifra se corresponde con las 3.000 plazas que esta administración va a concertar con las residencias privadas desde setiembre de 2021, hasta diciembre de 2023, para ofrecer la mencionada atención residencial a las personas dependientes que tienen derecho a recibir esta prestación, a un precio de 90 euros/día. De esta cantidad, las personas usuarias y/o sus familias copagan entre el 30-50% a la entidad foral".
"El coste de esta misma atención, en los centros del Instituto Foral de Atención Social (IFAS), referente de las reivindicaciones sindicales, se situa en el entorno de los 275-300 euros/darios según los presupuestos de este ente foral, es decir el triple", insiste.
Al igual que ocurre en otros sectores, en los últimos años diversos fondos de inversión han ido adquiriendo y promoviendo centros residenciales que alquilan a gestores profesionales a cambio de una rentabilidad proporcionada y razonable. "Utilizar el despectivo calificativo de “buitres” a estos inversores solo se justifica por el desconocimiento de la realidad y/o, la intención de criminalizar a la iniciativa privada, en un discurso demagogico, con una importante carga ideológica", recuerda la asociación empresarial.
Y añade: "Por dar algun dato interesante, Elkarkidetza y Geroa, entidades vascas de previsión social, son accionistas de referencia de Healthcare Activos, el fondo especializado que más residencias tiene en el Estado Español. Los sindicatos vascos tienen el 50% de representatividad en las asambleas y juntas de gobierno de ambas entidades, y en consecuencia, del control de las mismas, y del destino de los fondos de sus socios".
Por ello, y como han manifestado anteriormente, les "preocupa la utilización político-sindical que se quiere hacer de este conflicto por la proximidad de las elecciones locales y forales usando para ello a las personas dependientes y sus familias".
Desde GESCA, lamentan mucho las molestias que estas jornadas de huelga puedan causar a las personas a las que atienden y a las que se deben, y seguirán "trabajando para tratar de buscar puntos de encuentro con los sindicatos en el seno de la negociación colectiva".