Según un estudio de la Universidad de Missouri (Estados Unidos) publicado en una revista americana especializada en calidad de atención en residencias de mayores, existe una relación directa entre la adopción de tecnologías de la información más sofisticadas y la mejora en la calidad de la atención.
Estas mejoras incluyen disminuciones significativas en las infecciones del tracto urinario, residentes que pasan de vivir con dolor intenso a uno moderado y disminución en la aparición de úlceras por presión así como mejora en las existentes.
El mundo sanitario, especialmente el hospitalario lleva años aplicando tecnología de información médica (TI). Las residencias de tercera edad, sin embargo, no han avanzado en su aplicación con la misma velocidad, algo que en el caso de Estados Unidos se atribuye a la falta de incentivos. Una asignatura pendiente que ahora parece estarse afrontando, sobre todo después de la pandemia de Covid-19 es el intercambio de información de salud y el acceso a los registros de salud electrónicos por parte de los proveedores de atención en todos los entornos, lo que les permite abordar mejor las necesidades de los pacientes.
Este estudio nos ayudó a ver qué tecnologías mejoran qué elementos de cuidado.
Ahora, el estudio a que hacemos referencia, ha vinculado la tecnología de la información de las residencias de personas mayores más sofisticada, incluidos los registros médicos electrónicos y otros sistemas de datos digitales en la atención a los residentes, el apoyo clínico y las actividades administrativas con mejoras específicas en la calidad.
“Ya sabíamos que la tecnología de la información puede ayudar a crear mejores resultados en la atención, pero este estudio nos ayudó a ver qué tecnologías mejoran qué elementos de la atención”, dice Gregory Alexander, profesor de informática clínica en la Universidad de Missouri. "A medida que las capacidades de TI y el alcance del uso de TI mejoraron en las residencias de ancianos, vimos una disminución asociada en las infecciones del tracto urinario, entre otras correlaciones". Así lo ha recogido la revista Futurity.
Alexander y sus colegas recopilaron encuestas una vez al año durante dos años en residencias de tercera edad de los Estados Unidos. Los investigadores compararon las respuestas, que calificaron la sofisticación de la tecnología de la información de una instalación determinada, con datos federales que describen 18 medidas de calidad en esas mismas instalaciones, y la tecnología tuvo efectos positivos en la calidad de la atención. Por ejemplo:
Las instalaciones que informaron una mayor capacidad de TI en las actividades administrativas se asociaron con un porcentaje más bajo de residentes que informaron dolor de moderado a severo.
El mayor uso de tecnologías de apoyo clínico, que incluyen sistemas de laboratorio, se asoció con porcentajes más bajos de residentes con incontinencia urinaria.
Los aumentos en el uso de tecnología en la atención de los residentes se asociaron con porcentajes más bajos de residentes con úlceras por presión nuevas o que empeoraron.
Los investigadores también observaron que, si bien la tendencia general fue un aumento en la adopción de TI, algunas residencias de ancianos perdieron capacidades entre los años uno y dos. Aunque estas instalaciones eran atípicas, Alexander dice que reflejan los desafíos que enfrentan las residencias de 3ª edad cuando adoptan nueva tecnología.
“Los fondos de incentivos federales se destinan a hospitales y atención ambulatoria, no a residencias de 3ª edad”, dice Alexander. “Muchas residencias geriátricas no cuentan con un experto capacitado para administrar la tecnología, por lo que incluso si deciden actualizar sus capacidades de TI, pueden abandonar algunas porque son demasiado difíciles o costosas de administrar. Si no se les reembolsa por invertir en tecnología de la información, es posible que decidan que no vale la pena el tiempo y el dinero ".
Alexander dice que debido a que el estudio detalló los impactos de una variedad de factores específicos de TI en diferentes aspectos de la calidad de la atención, los datos podrían ayudar a informar a los administradores de residencias de personas mayores sobre qué características de un sistema de TI son importantes para adoptar para mejorar la calidad de la atención. Esta información podría ser muy útil para los administradores y otros líderes a la hora de tomar decisiones sobre cómo diseñar e implementar sistemas de información.
Ahora hay que ver si lo que se predica sobre residencias en Estados Unidos podría tener sentido en una residencia de 3ª edad en Madrid o Barcelona.
Si (
No(