Muchas residencias se están convirtiendo en punteros centros de innovación en la atención a personas dependientes que permiten, por ejemplo, mejorar la calidad de vida de las personas con demencia a través de muñecas.
Este mes de diciembre, Inforesidencias organiza un seminario práctico en Madrid (día 14) y Barcelona (día 20) sobre terapia con muñecas. La psicóloga especializada en trabajo terapéutico con muñecas en personas mayores con demencia, Nuria Carcavilla, que impartirá este seminario, ha explicado a Dependencia.info la conveniencia de una terapia que promueve el desarrollo de la identidad del mayor, así como la satisfacción de necesidades básicas individuales, como el apego, el confort, la inclusión, la ocupación, la comunicación o interacción, la identidad o los instintos innatos, entre otras.
¿De dónde viene esta idea, dónde surge?
La teoría del Apego, de John Bowlby, y el Modelo enriquecido de la demencia, de Tom Kitwood son puntos importantes para comprenderla.
La mayoría de nosotros tenemos la necesidad de sentir que hay alguien con quien estamos seguros y esto se acentúa en situaciones de mayor pérdida o vulnerabilidad, como puede ser en el caso de la demencia. Algo similar ocurre con la necesidad de sentirnos ocupados, de participar de manera positiva en nuestro entorno para ver reforzada nuestra identidad.
Una muñeca puede funcionar como una figura de apego, ofreciendo seguridad y contacto, y una actividad agradable para promover el desarrollo de la identidad y así se ha incorporado, desde hace décadas, en los programas de atencio?n a personas con demencia de pai?ses como Japo?n, EEUU, Australia o Reino Unido.
¿Cuál es el objetivo principal de esta terapia?
La intervención con muñecas persigue satisfacer una variedad de necesidades básicas individuales como el apego, confort, la inclusión, ocupación, comunicación/interacción, identidad o instintos innatos... Todo ello nos permite ofrecer a la persona una herramienta para lidiar con su angustia psicológica interna, experimentándola de una forma más adaptativa.
¿Para qué tipo de personas está más indicada?
Se utiliza principalmente con personas con demencia en fases moderadas avanzadas, en las que la capacidad de comunicación está alterada y no cuenta con oportunidades de participación positivas en su entorno. También está teniendo buenos resultados en personas con diversidad funcional de edad avanzada.
¿Cuáles son sus principales beneficios en la persona? ¿Ventajas?
La evidencia que existe en el uso de la terapia con muñecas en la atención a la demencia está documentada en numerosos estudios. Sus beneficios pueden resumirse en la mejora de la comunicación, reducción del nivel de angustia y uso de medicamentos antipsicóticos, mejora de la ingesta nutricional, calidad del sueño y una interacción más positiva con el entorno.
Especialmente importante resulta el intercambio de roles, permitiendo a la persona cuidar, en lugar de ser cuidada donde la expresión emocional cobra una gran importancia.
Hablamos de una herramienta económica y accesible, con una aplicación tan viable como la de cualquier intervención no farmacológica.
¿Algún inconveniente?
La vida está llena de riesgos y para seguir adelante debemos asumirlos. Toda intervención tiene sus inconvenientes. Las sujeciones físicas o químicas tienen efectos secundarios que afectan notablemente a la calidad de vida de la persona con demencia.
El uso de una muñeca no tiene por qué suponer un inconveniente, siempre y cuando se introduzca desde un equipo de profesionales formado y comprometido con su aplicación.
Leo que no todos los profesionales son partidarios de este tipo de terapias... ¿cómo está actualmente el debate?
Evidentemente la división existe, como en cualquier tema que nos saque de nuestra rutina y nos exija un cambio. Es tan necesaria como enriquecedora para poder avanzar en la calidad de los apoyos que ofrecemos a las personas.
Todavía a muchos profesionales les cuesta encajar a una muñeca en su mochila de trabajo y yo siempre pienso que cuanto más llena esté, mejores serán las soluciones que podamos ofrecer a cada persona. Cuando trabajamos con personas desorientadas, la máxima está en centrarnos en las soluciones que les reporten el mayor bienestar, por eso siempre soy partidaria de dejar de lado la forma y centrarme en el fondo.
¿Puede atacar la dignidad de una persona mayor que esta “juegue con muñecas?
Precisamente esta visión errónea es la que lleva a muchos profesionales a posicionarse en contra del uso de muñecas. Debe quedar claro que esto no es un juego, nadie ha venido a jugar, ni a “entretener” a la persona, sino a diseñar intervenciones acordes con sus necesidades actuales para mejorar su día a día.
Y es igualmente necesario que los profesionales sociosanitarios basemos nuestras decisiones de trabajo en los principios básicos de la bioética para que, lejos de dividirnos, se generan encuentros y debates que nos permitan seguir avanzando hacia una atención integral centrada en la persona con demencia.
Seminario práctico en Madrid: 14 de diciembre . Inscripción al seminario de Madrid
Barcelona: 20 de diciembre. Inscripción al seminario de Barcelona
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