El Gobierno de China acaba de aprobar recientemente una norma nacional que establece criterios para evaluar la calidad de los servicios de las residencias de personas mayores, según el periódico China Daily. Se presenta en un momento de rápido envejecimiento de la población, ante la expectativa de que la demanda de mejores servicios de atención a los ancianos aumente en las próximas décadas.
La normativa establece que todas las residencias deben cumplir con una serie de requisitos básicos, como son: contar con médicos titulados e instalaciones sin barreras, guardar registros sanitarios de todos los residentes y organizarles al menos un chequeo médico al año. Entrará en vigor a partir del 1 de julio y busca mejorar el acceso de las personas mayores a los servicios de calidad.
De esta forma, los hogares de ancianos se dividirán en cinco categorías. Estarán calificadas de mejor a peor, desde un 5 al 1, por un periodo de tres años. Pasado este tiempo, será obligatorio renovar la calificación, que dependerá de una revisión.
Los directores de las residencias deben solicitar una evaluación si desean participar en el sistema, pero no es obligatorio.