La pandemia ha trastocado cientos de hábitos, entre ellos el de pisar un sitio (un museo, una galería, un restaurante, una propiedad, etc.) para conocerlo y recorrerlo. Son muchas las empresas, de distintos tipos de rubros, que han encontrado en las visitas virtuales una solución a los nuevos (y difìciles) tiempos que corren.
Un tour o visita virtual es una herramienta digital que sirve para simular un espacio real mediante fotografías en 360 grados unidas y encadenadas a través de un software. De esta forma, el usuario aprecia de una manera mucho más cómoda y realista -desde la pantalla de su ordenador y sin salir de su casa- la estética, los colores y los detalles de una determinada propiedad.
El sector inmobiliario es uno de los que más ha innovado en esta herramienta en el último año. No obstante, las visitas virtuales también seducen a profesionales del sector de la restauración, gestores sanitarios, gerentes de tiendas, responsables de entornos naturales y culturales, colegios y residencias de la tercera edad.
Son cada vez más las empresas que ofrecen recorridos 3D para poder brindar experiencias en remoto a los usuarios.
Beneficios de una visita virtual
Para muchos, la experiencia presencial no puede ser reemplazada por una virtual. Sin embargo, los tours a través de una pantalla y con un ratón tienen sus ventajas y beneficios.
- Excelente visualización tridimensional de los proyectos.
- Interactividad y navegación real por el lugar.
- Son compatibles con dispositivos móviles, tablets y computadoras.
- Los usuarios pueden personalizar la visita e interactuar libremente, controlando la velocidad de giro, parada, ampliación con un simple movimiento.
- Diferenciación y confianza: las empresas pueden destacar por encima de sus competidores.
- Visibilidad web: buscadores de internet como Google premian la innovación y el compromiso tecnológico de las empresas con un mejor posicionamiento.
- Sin límites de horarios y geográficos: el lugar físico y la disponibilidad horaria dejan de ser un impedimento a la hora de recorrer un determinado sitio.
¿Cómo se realiza?
Cualquier espacio y/o negocio es candidato para desarrollar y lanzar una visita virtual. No se necesita ningún tipo de requisito o preparación especial del recinto. Los profesionales a cargo de esta herramienta virtual suelen demorar menos de 48 horas en dejar habilitada una visita virtual.
Para realizar estos tours virtuales se necesitan tres elementos: una cámara 360º, un trípode panorámico y el software.
Estas visitas online se realizan tomando fotos 360º y enlazándolas entre sí. El conjunto de imágenes se puede subir directamente a la plataforma de Google Maps o se puede realizar un montaje con distintos programas (software) para la inclusión del tour virtual en páginas web.
Las fotografìas pueden tomarse con un simple teléfono móvil (resultado poco profesional) o cámaras réflex con objetivos gran angulares (8 – 10 mm) apoyadas en un trípode para que no haya movimiento al tomar la panorámica.
Cabe aclarar que las cámaras réflex realizan varias fotografías hasta cubrir la totalidad de la esfera (luego hay que unirlas). Las cámaras específicas, en cambio, realizan todo el proceso en uno. Cuentan con varios objetivos diferentes y captan toda la escena en un solo disparo.
El crecimiento de las visitas virtuales durante la pandemia
El fotógrafo español especialista en visitas virtuales Javi Arquimbau, remarcó a fines de 2020 una “tendencia al alza” en el uso de esta tecnología.
“Aunque siempre ha existido demanda de recorridos virtuales por instalaciones y espacios diferentes, en los momentos actuales cada vez son más las empresas interesadas, relacionadas con todo tipo de actividad: clínicas, restaurantes, inmobiliarias, concesionarios y un largo etcétera”, señaló sobre este fenómeno comercial.
“Muchos responsables de Marketing afirman que en esta época de Covid, el recorrido virtual, al igual que el vídeo corporativo, mejora la percepción que tienen los internautas sobre el negocio, generándoles mayor confianza si ven las instalaciones preparadas. En definitiva optimiza la visión que un cliente tiene de tu espacio, a la vez que ayuda al posicionamiento para alcanzar nuevos visitantes”, concluyó.
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