Un camión de Bubble Texcare circula entre el barro para hacer el servicio de lavandería a las residencias que no tenían posibilidad de lavar y desinfectar la ropa por la DANA en la Comunidad Valenciana.
(Foto: Bubble Texcare).
Con carácter de urgencia, las residencias devastadas por la DANA han de enfrentarse al problema sanitario generado por no poder lavar la ropa, que en montañas se acumula en cuartos donde el mal olor por restos orgánicos y humedad, y el riesgo de infecciones, amenazan con males aún mayores en centros cuyas lavanderías internas han sido arrasadas por el agua y el barro, o anuladas por falta de gas, luz, agua, o por falta de personal que habita en la zona siniestrada y no puede acudir al trabajo.
Como miles de voluntarios que ayudan con el barro, lo enseres, agua o alimentos, de forma inmediata y desde el principio, la empresa Bubble Texcare ofreció gratuitamente a todas las residencias y centros de discapacidad necesitadas, una solución de limpieza externalizada, yendo con camiones de Guadalajara a Valencia dos días por semana, recogiendo sucia y entregando limpia, la ropa de vestir de residentes y lencería todos los sábados y miércoles, hasta que la última residencia haya recuperado su capacidad de atender esta necesidad en condiciones de higiene óptimas en interno o externalizando.
Pero atención, es más fácil decirlo que hacerlo. Para comunicarlo a todos los afectados con éxito, y llegar con ayuda de forma efectiva en una zona siniestrada y bloqueada, se requieren seis actuaciones precisas y previas:
1.- Divulgación
Para conseguir que esta información llegue a todos los afectados a pesar del destrozo en el que están inmersos, Bubble Texcare contó con ayuda inmediata de los medios de comunicación sectoriales que lo publicaron, de las asociaciones nacionales y regionales AESTE, AERTE y LARES, que contactaron con todos sus socios, de la Dirección General de Dependencia y de Mayores de la Generalitat Valenciana que listó a todos los necesitados y ofreció la ayuda, de clientes de Bubble que informan a compañeros afectados, de
Inforesidencias.com y Dependencia.info que enviaron emails directos a todos sus contactos de Valencia, y de muchas personas más que se movilizaron voluntariamente y siguen haciéndolo, para que no quede nadie sin saber que existe esta ayuda.
2.- Prelación de necesidades
Hay que conseguir localizar telefónicamente a los interlocutores válidos de cada una de las residencias necesitadas, y averiguar el estado de sus recursos y riesgos para hacer la prelación de actuaciones. Algunos, cuando les decían que podían recoger la ropa sucia y devolvérsela limpia cada miércoles y cada sábado, se echaban a llorar.
"Un desahogo en jornadas desesperantes de 14 o 16 horas, tras haber vivido, como nos cuentan desahogándose, experiencias traumáticas de auténticos héroes anónimos, salvando la vida de incontables ancianos sorprendidos por el agua, que con ruido de explosión rompe puertas y paredes e inunda comedores llenos de ancianos en el momento de la cena, y a los que en ocasiones hay que cargar hasta plantas superiores a medio oscuras porque se ha ido la luz y los ascensores no pueden usar", se explica Marco Antonio G Baile, director general de Bubble Texcare.
3.- Desbloquear barreras logísticas
Recorrer días antes en coche la ruta del camión es preciso para determinar los centros inaccesibles, ya fueran zonas cortadas por la Guardia Civil o por el barro. Para el primer caso se disponía de salvoconductos de Ayuda Humanitaria expedidos por la Generalitat, y para el segundo, se acordó con la Dirección General del Mayor que aportarían voluntarios o cuerpos de seguridad para cargar a pulso con las jaulas de ropa entre el camión y la residencia.
4.- Garantizar las seguridad del personal
Establecer los protocolos de seguridad para el personal, equipados con EPIS para ropa contaminada y con la formación específica, tal como acudir al hospital a ponerse la antitetánica si reciben algún corte.
5.- Coordinar entregas-recogidas entre equipos de Bubble y equipos de la residencia
Esta complicación se produce porque resulta imprevisible el horario de llegada en una Valencia caotizada, donde las calles se bloquean, desbloquean y vuelven a bloquearse por días, al margen del control y ayuda de cualquier GPS, con una V-30 por la que se circula a 1km/h y donde los tiempos de desplazamiento de escasos kilómetros se miden en horas.
6.- Garantizar la seguridad higiénica del proceso
Ante este riesgo de epidemias, toda la ropa tratada debe tener la máxima garantía de desinfección y asepsia: nunca se mezcla la ropa de una residencia con otra (lo impide siempre el ordenador de procesado de Bubble), se aplican ciclos de desinfección en cada lavadora tras cada lavado, se aplica el sistema RABC (Risk Analisys and Biocontamination Control) y la norma europea UNE-EN 14065 de control de la biocontaminación en procesos de lavandería, con barrera sanitaria, sala blanca en depresión, y con entrega de la ropa limpia higienizada, doblada y empaquetada con triple barrera de protección para evitar la contaminación cruzada en la residencia.
Siendo la actividad habitual de la empresa solventar los problemas que la ropa de vestir da a las residencias mediante externalización del lavado y un sistema anti-pérdidas propio, su adaptación a situaciones extremas, se puso a prueba durante el COVID-19 en Francia, donde durante toda la pandemia y confinamiento, miles de mayores en centenares de residencias siguieron recibiendo el servicio externalizado de Bubble.
Sin duda esta experiencia contribuye a afrontar con soltura el cometido importante y generoso, que todos agradecemos, frente a la dana del 29 de octubre de 2024 en Valencia.