Estamos en plena campaña para las elecciones autonómicas y municipales que se celebrarán, como estoy seguro que saben, el próximo 28 de mayo. Se trata de unos comicios que, como también imagino que intuyen, se están enfocando en clave nacional con vistas a las generales de, muy probablemente, diciembre. Hay mucho en juego, políticamente hablando, y como quiera que los sondeos apuntan a que la mayoría de las plazas se ganarán con resultados muy ajustados, los partidos políticos intentan arrimar el ascua a su sardina e intentan congraciarse con los sectores cuyos votos puedan ser decisivos.
El de las personas mayores, por su peso demográfico, y, dentro de él, el de los que necesitan cuidados geroasistenciales, porque engloba también a sus familiares, es uno de ellos.
Es por ello que los principales actores representantes del sector se lanzan a recordar a las formaciones cuáles son sus necesidades, unas más acuciantes que otras. A nadie sorprende que una financiación justa de servicios que cada día son más costosos está en el primer lugar de una lista que, por otra parte, tiene más reivindicaciones.
De esta forma, la Plataforma de Mayores y Pensionistas (PMP) pide que los partidos se comprometan a incrementar sus presupuestos para conseguir que la dependencia sea un derecho subjetivo efectivo en toda España. Es más, han hecho la petición expresa de que sea considerada una cuestión de Estado.
Por su parte, las patronales de la Dependencia, las que representan a los centros que se encargan de proveer de los servicios y cuidados necesarios a las personas mayores, también han explicado a Dependencia.info cuáles son sus peticiones a las formaciones políticas que concurren a las elecciones municipales y autonómicas, pero que no son muy diferentes de las que harán de cara a las generales de final de año.
Puede parecer reiterativo, pero es que nadie regala nada y si se quieren más y mejores servicios alguien lo tiene que presupuestar, ver si es viable y, por supuesto, lo tiene que pagar. Lo explica claramente el presidente de la Federación Empresarial de la Dependencia (FED), Ignacio Fernández-Cid, que lamenta, para empezar, la falta de una memoria económica que nos demuestra que aspiramos a modelos alcanzables:
"Si aspiramos a tener un sistema de cuidados mejor y de más calidad y nos fijamos en los modelos que actualmente se están desarrollando en el norte y en el centro de Europa, debiéramos hacer muy bien nuestros números para ver si podemos llegar a un modelo con esas características y con ese nivel de calidad. Pero lo que no podemos hacer es lanzarnos sin ni siquiera hacer una memoria económica para ver si es sostenible o no sostenible y para ver si las Comunidades Autónomas, a través de los conciertos que tienen desarrollados, pueden pagar los precios públicos que reflejan los costes reales en los que vamos a incurrir. Lo que no vale es aspirar a modelos que son inalcanzables y, por supuesto, insostenibles.
Por otro lado, ese mayor requerimiento de personal y esos mayores estándares de calidad lo que van a suponer es un incremento muy importante en nuestros costes y no nos podemos olvidar que más de 181.000 plazas privadas en nuestro país están financiadas por los dependientes y por sus familias, independientemente de que una pequeña parte estén financiados a través de prestaciones económicas vinculadas al servicio.
No hacer los cálculos es incurrir en una grave irresponsabilidad porque este año, que hemos tenido que incrementar nuestros nuestros precios ajustados a IPC a 5,7, ya ha habido muchas tensiones en muchas residencias a lo largo del país. Así que, si vamos a ese modelo que se está impulsando por parte del Ministerio de Derechos Sociales, será insostenible y pasaremos de 2.000 a 3.000 euros de media. ¡A ver cómo lo van a pagar las familias!".
Con otras palabras, el presidente de Lares, Juan Vela, apuntaba que "la propuesta más importante" que les parece más urgente, porque va directamente relacionada a los mayores más vulnerables, es precisamente aquella que va dirigida a "dar prioridad a las personas mayores empobrecidas de nuestra sociedad para que encuentren una plaza residencial, una plaza de apoyo".
"Nos parece una necesidad prioritaria", señalaba, para subrayar que, en segundo lugar también es prioritario "el apoyo a las entidades con plazas solidarias para que tengan subvenciones y apoyos cuando no han tenido posibilidad, estas personas mayores, de tener una plaza rápida de acceso directo a las residencias".
Vela incide en que "esto implicaría que no tuvieran la burocracia que tienen y que su acceso fuese mucho más rápido". Concluye con que también piden que "tuviesen la cobertura que precisa", porque aquí "se nos juntan dos vulnerabilidades: la dependencia y la pobreza".
Igualmente, para la presidenta del Círculo Empresarial de Atención a las Personas (CEAPS), Cinta Pascual, como para el resto de patronales, casi todo pasa porque España llegue al 2% del PIB para atención a las personas mayores y con dependencia para igualarnos a los países de nuestro entorno.
En una carta que CEAPs ha enviado simbólicamente a los partidos políticos, además de reclamar que no se haga electoralismo con las personas mayores, se pregunta la protagonista de la misiva, que sabe que los Servicios Sociales no son gratis, hasta cuándo tendrán que rascarse el bolsillo ellos, o sus familias, para pagar el servicio que necesitan. Pide "que se corrija la infrafinanciación persistente en el tiempo que sufre la Dependencia".
En esta línea, la presidenta de la Asociación de Empresas de Servicios para la Dependencia (AESTE), Natalia Roldán, también habla de la necesidad de llegar a un Pacto de Estado con una visión a largo plazo y para el cual hace falta, por supuesto, una financiación garantizada y adecuada para poder hacer frente a las crecientes necesidades de una realidad que presenta una sociedad cada vez más envejecida. Lo explica así:
"Nuestra principal reivindicación, es la necesidad de que se alcance un Pacto de Estado en políticas de cuidados a las personas mayores, con visión a largo plazo por parte de todos los responsables públicos, que dé una verdadera respuesta a las principales necesidades actuales y futuras de la sociedad.
Nos encontramos ante una población cada vez más envejecida, en la que los cuidados de larga duración no harán otra cosa que aumentar de una manera drástica, lo que inevitablemente conllevará un aumento de las situaciones de dependencia, lo que será un enorme reto tanto para las Administraciones públicas, como para el sector y el país, en general. Para abordarlo se necesitará una potente batería de medidas que ponga el foco en lo realmente importante, con independencia de los intereses políticos, que es la calidad de los cuidados y las necesidades reales de la población.
Para poder dar respuesta a esta situación, consideramos, por tanto, que es imprescindible la existencia de un consenso sobre el sector de los cuidados a la vez que se apuesta por políticas sociosanitarias cohesionadas, que garanticen además, que estos servicios esenciales, tendrán una financiación garantizada y adecuada para poder hacer frente a las crecientes necesidades de una realidad que cada vez está más evidenciada.
Necesitamos un sistema fuerte, cohesionado y capaz de dar una respuesta adecuada a las necesidades de la población de hoy en día, que este basado en el conocimiento de los expertos del sector".
Igualmente, Natalia Roldán, enumera otras demandas que requieren de una inminente revisión y que considera importantes para el sector de las personas mayores mas allá del necesario pacto de Estado:
"Déficit de profesionales: Siendo conscientes de que España es uno de los países con mayor esperanza de vida y que tenemos una población con gran tasa de envejecimiento que necesita una respuesta urgente a este problema, debe ser una cuestión prioritaria, la búsqueda de soluciones para paliar la falta de profesionales de la que adolece el sector, por lo que hace falta una revisión de la integral del sistema de recursos humanos del sector de la dependencia.
Se trata de un problema urgente del que venimos avisando desde hace unos cuantos años y para el que cada vez es más necesario adoptar una solución que pasa por un trabajo conjunto, tanto del sector, como de los poderes públicos, y que atañe de forma transversal a Sanidad, Educación y Servicios Sociales. Los profesionales son el eje del sector de los cuidados, para lo que es acuciante, además, apostar por una profesionalización real de los servicios, que requiere la formación de los profesionales como aspecto clave para garantizar la calidad de los cuidados, acompañada de una inversión económica adecuada que permita a las empresas trasladar esta inversión a sus propios trabajadores.
Desde AESTE entendemos que la apuesta a futuro pasa por el aumento de las plazas de profesionales sanitarios y del ámbito de los cuidados, analizándose de manera previa, no solo cual es el volumen de profesionales que será necesario de cara al futuro, sino también, su formación, su remuneración, e incluso la generación de nuevas figuras que, además de abrir nuevas trayectorias profesionales, atraigan talento e interés por el sector sociosanitario y por otra parte, sean específicas para cubrir las necesidades reales del sector de los cuidados.
De manera paralela, deberían buscarse soluciones que permitan al sector poder solucionar a corto plazo las dificultades a las que nos enfrentamos, para lo que la agilización en la homologación de títulos, podría ser una solución.
Libre elección: defendemos y creemos en la libre elección que todo ciudadano debe tener a la hora de decidir dónde y cómo quieren vivir y ser cuidados, cuestión íntimamente relacionada tanto con la apuesta que las Administraciones publicas deberían hacer por las prestaciones vinculadas al servicio, como por el desarrollo y diseño de adecuado de servicios complementarios a los centros residenciales, como son la teleasistencia y la ayuda a domicilio , pero con una configuración totalmente distinta a la que tienen ahora, siendo servicios altamente desaprovechados y que sin duda, son una clara poción para contribuir en el desarrollo de la promoción de la autonomía personal.
IVA unificado: Desde AESTE, llevamos años reclamando que los servicios de los cuidados tengan un IVA unificado del 4%, con independencia de la procedencia pública o privada de la prestación.
Colaboración público/privada: La colaboración público-privada es fundamental para conseguir un sistema de atención a la dependencia que sea capaz de dar respuesta a necesidades, del todo heterogéneas, siendo el único camino para generar un sistema amplio, con capacidad para llegar a todo el territorio español. Por lo que esta alianza debe ser prioritaria, siendo sectores avocados a una necesaria interactuación.
En resumen, desde AESTE entendemos que el actual modelo de sector ya no responde a la realidad y necesidades actuales. Por lo que necesita un cambio y ser repensado de manera inmediata. Es necesario que se produzca un verdadero desarrollo de los servicios, para alcanzar un sistema de cuidados de alta calidad, encontrándonos en un momento decisivo, siendo, por tanto, básica una dotación presupuestaria suficiente para que el sector de la dependencia pueda dar respuesta a las urgentes necesidades que se le plantean".
Desde CEAPs lamentan, del mismo modo, que "hacer oídos sordos a todas estas reclamaciones es poner en solfa y dejar en el 'limbo' a un sector que da empleo a más de 400.000 personas en España y que se encarga de atender a todas esas generaciones de españoles que ayudaron a construir el país".
Cinta Pascual apela a que no se olvide a las personas mayores, a que se aborde "el problema de déficit ya endémico de profesionales" porque calculan que "ya faltan más de 100.000 auxiliares de geriatría que quieran trabajar en este sector", exige una "coordinación sociosanitaria real", que las administraciones "impulsen las prestaciones vinculadas al servicio (PVEs) y que aumenten sus cuantías para que puedan contratar el servicio que así deseen y nadie se quede fuera del sistema"; también que "se fije un IVA único del 4% para todos los Servicios Sociales"
Para terminar, Ignacio Fernández-Cid opina que "es ineludible que le pidamos a los partidos políticos que nuestro sector deje de estar en el epicentro de la contienda política". "No podemos estar cuestionando el sistema de cuidados y a los operadores permanentemente. Cada vez que sucede cualquier cosa a lo largo y ancho del país, se generaliza como si los profesionales que damos el servicio de cuidados no fuésemos suficientemente responsables y buenos profesionales como para dar un servicio", añade.
El presidente de la FED propone y concluye: "Si suceden cosas con mala praxis, lo que se debe hacer es depurar las responsabilidades, pero no enjuiciar y meter a todos en el mismo saco como si fuésemos presuntos delincuentes. Es una responsabilidad de todos y todos debemos llevarlo adelante y para ello tiene que estar alejado de la contienda política".