La Asociación de Empresas de Servicios para la Dependencia (AESTE) ha pedido un Pacto de Estado para garantizar el sistema de cuidados de las personas mayores y dar respuesta a las principales necesidades actuales a las que se enfrenta el sector. Las claves, según esta patronal, pasan por la calidad, el empleo, la eficiencia, la sostenibilidad y, especialmente, la libertad de elección del centro de atención por parte de los dependientes.
Así lo ponía de manifiesto la presidenta de AESTE, Natalia Roldán, durante su intervención en la Comisión de Sanidad y Asuntos Sociales de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) en la que se ha trazado la hoja de ruta del sector en los próximos meses.
Hay que recordar que en España en la actualidad hay 1.415.578 dependientes, de los que 193.436 no tienen ninguna prestación. También que el sector de la dependencia aúna los servicios de residencias, centros de día, teleasistencia y ayuda a domicilio. En conjunto, aportan una facturación anual de 7.000 millones, supone un 0,6% del PIB y da empleo a más de 300.000 personas.
En este sentido, Roldán incidía en que “si el cuidado de los mayores ha sido siempre importante, y tras el paso de la pandemia se determinan como servicios esenciales aquellos vinculados con la dependencia, cómo es posible que no lo sean ahora para garantizar su financiación”.
A lo largo de su intervención, la presidenta de AESTE hacía hincapié en la necesidad de que se alcance un sistema de cuidados de calidad, “accesible para las personas mayores que requieran esos servicios, flexibles según varíen las necesidades de libre elección para los usuarios y con una financiación que garantice su sostenibilidad en el tiempo”.
Al respecto, para esta patronal, la colaboración público-privada es fundamental para conseguir un sistema de atención a la dependencia que sea capaz de dar respuesta a las necesidades del colectivo de personas mayores, un grupo de población que actualmente representa a más del 20% de la ciudadanía estatal. Natalia Roldán, clara: “Es fundamental que consigamos un sistema robusto que, con todos los actores implicados involucrados, garantice los mejores cuidados de las personas mayores”.
Del mismo modo, indicó que el Acuerdo de Acreditación aprobado por el Ministerio de Derechos Sociales nos aleja, aún más, del objetivo del 5% de plazas residenciales marcadas por la OMS, incrementa los costes generando mayor presión para la economía de las familias y de las CCAA, además de generar gran incertidumbre para el abordaje de proyectos, ya sea en el ámbito residencial o en el domiciliario, frenando inversiones que generan puestos de trabajo no deslocalizables.
Por último, AESTE también señalaba la necesidad de aumentar las plazas de profesionales sanitarios, la mejora de las condiciones de los conciertos autonómicos o la defensa de la imagen del sector.
Diagnosticar y proponer
Sobre las medidas que debería incluir ese pacto de Estado se pronunciaba también en estos términos el secretario general de AESTE, Jesús Cubero: “Lo primero que tienen que hacer los grandes partidos políticos en España es ponerse de acuerdo para auditar cuál es la situación del sistema, ver cuáles son las carencias que tenemos actualmente y, a partir de ahí, consultar con familias, con los profesionales, con los empresarios y que diagnostiquemos y propongamos todas las medidas que hay que llevar a cabo”.
Cubero añadía que había que tener muy en cuenta un dato: “En el año 2050, un tercio de la población va a ser mayor de 65 años; o tomamos esas medidas actualmente o no vamos a llegar para solucionar esos problema que hay”.