Oficialmente ha sido inaugurado el Bibetoki, un espacio que se encuentra en el centro de Lezo y que tiene como objetivo fomentar la reflexión y el diálogo sobre la longevidad y una vida plena en la vejez. Esta iniciativa es fruto de la colaboración entre la Fundación ADINBERRI de la Diputación de Gipuzkoa y el departamento de Bienestar, Juventud y Reto Demográfico del Gobierno Vasco.
Se ha creado este espacio como un lugar de encuentro para la comunidad, donde se han llevado a cabo sesiones y actividades enfocadas en enfrentar los retos y aprovechar las oportunidades que presenta una sociedad en constante envejecimiento.
El Bibetoki se ha desarrollado como parte del proyecto BIBE (Bizitza Berria eta Betea – Nueva Longevidad y Vida Plena), que fue lanzado hace un año con el propósito de abordar los desafíos relacionados con el envejecimiento en las sociedades avanzadas. Esta iniciativa, que se alinea con la reciente Agenda de Innovación de ADINBERRI, busca contribuir al establecimiento de un nuevo paradigma sobre longevidad y vida plena.
La colaboración del Ayuntamiento de Lezo, la Fundación Aubixa, Aptes, Helduak Adi, la Asociación de Jubilados de Lezo Aiton Borda y Agijupens es parte fundamental del proyecto BIBE. Esta iniciativa, liderada por la Fundación ADINBERRI, tiene como objetivo implementar acciones que transformen Oarsoaldea en una comarca modelo en la promoción del envejecimiento activo, saludable y significativo, enfocándose en el desarrollo de una vida plena y en el fomento socioeconómico de la región.
En una rueda de prensa llevada a cabo en el propio Bibetoki, se ha anunciado la apertura. A este evento asistieron Nerea Melgosa, consejera de Bienestar, Juventud y Reto Demográfico; Eider Mendoza, diputada general de Gipuzkoa; Mikel Arruti, alcalde de Lezo; Maite Peña, diputada de Cuidados y Políticas Sociales y presidenta de la Fundación ADINBERRI; Rakel San Sebastián, directora de esta fundación; Anabel Juaristi, vicepresidenta de Aubixa; Adriana Martínez, directora de APTES; así como Asun Carcedo, quien representó a las personas que han participado en las actividades realizadas hasta ahora y a la asociación de jubilados de Lezo, Aiton Borda.
Eider Mendoza, la diputada general, ha subrayado que la implementación de Bibetoki reafirma el “papel central” de Oarsoaldea en el ámbito de la “longevidad y vida plena”. Esta iniciativa pionera se suma a los esfuerzos por enfrentar los retos que plantea la transformación demográfica, complementando así el ecosistema local de cuidados que se ha desarrollado en Pasaia y el espacio de innovación ADINBERRI, actualmente en construcción en Trintxerpe. Ambos proyectos son impulsados por la Diputación de Gipuzkoa en colaboración con diversas instituciones y entidades sociales.
El “potencial transformador” del nuevo espacio inaugurado en Lezo ha sido destacado por Mendoza. “Nos ofrece una visión amplia de la innovación, en la que las personas mayores están en el centro y las innovaciones deben ser fruto del diálogo, del encuentro y de la participación. A su vez, este espacio se convierte en lugar de encuentro para hacer comunidad, un elemento fundamental para la realización de todas las personas y para vida en plenitud”.
La consejera de Bienestar, Juventud y Reto Demográfico del Gobierno Vasco, Nerea Melgosa, ha destacado la relevancia del proyecto BIBE en la promoción de una responsabilidad social entre las personas mayores hacia las generaciones más jóvenes. “Crecer como país requiere crecer en bienestar. Y ese deber es una responsabilidad de toda la comunidad: de las personas mayores, y también del resto de la sociedad civil. Involucrarlos a todos y todas a través de proyectos como BIBE es nuestro compromiso; y es que nuestro bienestar futuro depende de acertar en las decisiones que hoy tomamos”.
A lo largo del 2024, se ha llevado a cabo una investigación cualitativa dirigida por la Fundación Aubixa, con el objetivo de entender el significado de una vida plena en la vejez para individuos de entre 57 y 75 años. Este estudio ha facilitado la identificación de varios perfiles clave: aquellos que están cerca de jubilarse (con edades entre 57 y 62 años), quienes han recién completado su jubilación o están a punto de hacerlo, así como personas que han estado en esta etapa durante más de cinco años.
Importantes conclusiones han sido señaladas en el informe de Aubixa. La preocupación por la disminución de las redes de apoyo en comparación con generaciones pasadas ha sido expresada por los participantes, quienes atribuyen esta situación al incremento de hogares unipersonales y al aislamiento social. A pesar de considerarse "muy familiares", consideran fundamental encontrar un equilibrio entre su proyecto personal y el cuidado de la familia, estableciendo límites claros.
Un temor extendido se manifiesta ante la posibilidad de perder la autonomía, así como el sufrimiento y la dependencia tanto cognitiva como física. Para ellos, el autocuidado se valora intensamente como una prioridad fundamental. En cuanto a las relaciones que mantienen en la actualidad, las perciben como más frágiles, caracterizándolas como "líquidas", con un nivel de reciprocidad y empatía reducido.
La Asociación para la Promoción de la Tecnología Social Aptes ha tomado la iniciativa en una segunda fase, organizando sesiones dirigidas a la ciudadanía en Lezo. En este contexto, se han llevado a cabo tres encuentros temáticos cada mes y un café temático cada dos meses, donde se han discutido temas como la familia, los cuidados, la salud, las relaciones sociales y el legado personal.
La mayoría de las participantes en estas actividades han sido mujeres, cuyas características difieren según el tipo de actividad. En los encuentros, se ha observado una predominancia de personas mayores de 65 años, mientras que en los cafés han tomado parte individuos más jóvenes, con edades comprendidas entre los 50 y 55 años.
Hasta el momento, se han llevado a cabo diversas actividades que han revelado la necesidad de contar con lugares como el Bibetoki. En estos espacios, los vecinos y vecinas tienen la oportunidad de compartir experiencias, escucharse unos a otros y sentirse integrados en la comunidad. Los participantes han subrayado la relevancia de estos encuentros para contribuir al fortalecimiento del tejido social en Lezo.
Desde su inicio en febrero de 2024, el proyecto ha contado con la participación de cerca de 1.000 personas. En Lezo, más de 100 individuos han tomado parte en las sesiones de encuentro que continúan realizándose, mientras que casi 900 han respondido recientemente a un cuestionario que se lanzó hace unas semanas con el fin de recopilar información y avanzar en el objetivo de fomentar una vida plena durante la vejez.
La ciudadanía todavía tiene la oportunidad de participar en este cuestionario mediante el siguiente enlace: bibeproiektua.eus.
La fase de despliegue del proyecto BIBE está en marcha y se extenderá hasta mayo de 2025, incluyendo cuatro encuentros adicionales y dos cafés temáticos. Además, se ha planeado una fase final de socialización que tiene como objetivo consolidar los aprendizajes y expandir el impacto a otros municipios de Gipuzkoa.
El objetivo del proyecto es abordar uno de los desafíos más significativos que enfrenta el envejecimiento en las sociedades avanzadas: asegurar una vida plena durante la vejez y fomentar el progreso y la cohesión en una sociedad que se vuelve cada vez más longeva. Asimismo, incorpora un enfoque dual, considerando tanto al individuo como a la colectividad para ayudar a construir una sociedad más unida.
El nuevo paradigma de la longevidad y la Vida Plena será abordado a través de este proyecto, el cual se alinea con uno de los retos y líneas de actuación prioritarias en la reciente Agenda de Innovación de ADINBERRI. Desde Gipuzkoa, se busca realizar una contribución significativa en este ámbito.