En todas las residencias para personas mayores o con discapacidad, el momento de la ducha suele ser todo un desafío. ¿Alguna vez te has parado a pensar cuánto tiempo, esfuerzo y recursos se invierten para garantizar una ducha segura y eficaz?
Y no hablemos de que sea agradable y preserve la intimidad…
El día a día en una residencia está lleno de pequeñas luchas que muchas veces no se ven. Cuidadores y cuidadoras que hacen malabares con su tiempo, personal que no da abasto y recursos que nunca parecen ser suficientes. A esto se suman problemas recurrentes en los baños:
Para los residentes, una ducha no es solo una cuestión de higiene: es un (su) momento de bienestar. Sentirse limpio y cuidado puede marcar la diferencia en su bienestar emocional y físico. Pero para los cuidadores, estos minutos pueden convertirse en una fuente de estrés y desgaste físico importante.
Las limitaciones estructurales pueden hacer que algo tan cotidiano como una ducha se vuelva complicado. Esto genera no solo frustración, sino también riesgos innecesarios.
“¿Cómo enfrentamos este problema sin comprometer la calidad de la ducha?”
Imagina un sistema de ducha diseñado pensando específicamente en los retos que afrontan las residencias. Que no solo sea seguro y fácil de usar, sino también eficiente en el uso de recursos y adaptable a diferentes necesidades.
En Showee, creemos que cada ducha puede ser un momento más seguro, intímo y adaptado. Está diseñada para:
Y esto no acaba aquí, pronto os contaremos más.
En Showee no solo ofrecemos duchas, creamos soluciones que mejoran la calidad de vida de quienes las usan y de quienes cuidan. ¿Te gustaría saber más sobre cómo podemos ayudarte a transformar el cuidado en tu residencia?
“Porque cada gota cuenta y cada vida importa.”