Con el adelanto de la última oleada de la COVID-19 son muchos los trabajadores de residencias que se han visto obligado a guardar cuarentena, pese a no ser portadores del virus, por haber sido contacto directo con algún positivo. Las cuarentenas preventivas están abocando a muchos centros asistenciales y residencias a sufrir para garantizar el número mínimo de trabajadores y al límite del colapso por falta de trabajadores.
Encontramos muchos casos que figuran como falsos positivos, con trabajadores totalmente asintomáticos y acreditan en una PCR posterior que no llevan carga viral. Esta circunstancia puede motivar ausencias laborales de 7 días y generar un trasiego al equipo de los centros ya su normal funcionamiento. Recordamos que nuestro sector es uno de los que más carga emocional y laboral acumula desde el inicio de la pandemia.
En estos momentos, el mercado laboral del sector asistencial está sufriendo una grave crisis por carencia de personal y si debemos añadir la dificultad de encontrar sustitutos en estas fechas puede abocar a las residencias al límite de su capacidad de asistencia.
ACAD recuerda que la Generalitat todavía no ha anunciado la renovación para este 2022 del sobre coste COVID en las residencias y centros de día. Sin esta aportación, muchas residencias se verán obligadas al cierre, puesto que no podrán asumir los costes generados y sobrevenidos por la pandemia.