El
Consejo Español para la Defensa de la Discapacidad y la Dependencia (
CEDDD) ha inaugurado, en formato coloquio y dinamizado por el adjunto a Presidencia del CEDDD,
Íñigo Alli, el
I Consejo sectorial de Personas mayores y dependencia. Con la asistencia telemática de más de 60 personas entre profesionales del sector y entidades representadas, el acto empezó con el reconocimiento y memoria de las víctimas, así como los profesionales y familias que han trabajado tan duramente en la pandemia para las personas más vulnerables
La primera en tomar la palabra fue la consejera andaluza de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación, Rocío Ruiz, que subrayó que la forma en cómo tratemos a las personas más vulnerables, nos define como sociedad. Por ello destacó la voluntad de escucha activa y la participación de todos los sectores incluido público y privado; todos unidos para un modelo de calidad, poniendo el centro en la persona usuaria.
Centrándose en los efectos de esta crisis, ha hablado de empleo en la Comunidad de Andalucía y ha destacado que se han mantenido 28.260 profesionales de asistencia a domicilio que atienden a más de 82.000 personas. Así mismo ha ocurrido en los Centros residenciales y ha declarado su firme propósito de
trabajar por el Pacto de Estado por la Dependencia con el que garantizar el carácter de universalidad e igualdad de la aplicación de la Ley en todo el territorio nacional con más motivo aún en estos momentos, cuando la situación obliga a revisar el modelo de atención a la dependencia.
Otras propuestas relevantes fueron la de lograr una mejor coordinación con el sistema sanitario o garantizar que en España se aplique las mismas prestaciones, servicios y apoyos a la Dependencia.
Un presupuesto finalista
Por su parte, la presidenta del Círculo Empresarial de Atención a las Personas (CEAPs), Cinta Pascual, aseguró que la entidad a la que representa ya presentó hace dos años ante el Gobierno un informe exaustivo con el título de "El caos de la dependencia". Tras reclamar más inversión, "hay que invertir más en dependencia" (en nuestro país se invierte el 0,56% del PIB, siendo en otros países el 2%), recordó que el perfil de los residentes en España son mayores dependientes, con pluripatologías, deterior cognitivo o problemas de incontinencia, por lo que no es tarea sencilla que abandonen la residencia.
Ante el acoso a la imagen de los centros residenciales durante el tiempo de confinamiento por la pandemia, Pascual recalcó que ésta "es una crisis sanitaria y no social" y que la gestión de la crisis no se ha realizado en coordinación con las residencias. Además, volvió a insistir en que "el sistema sanitario se ha colapsado".
La presidenta de CEAPs apostó por un presupuesto para discapacidad y dependencia que sea "finalista" y que no se meta de nuevo en una bolsa a repartir entre las CCAA. "Miremos a Alemania que ha tenido EPIs y test", aseguraba para concluir que el COVID19 no entiende de tarjetas de presentación y afecta igual a residencias públicas o privadas, de manera que con la mejora de las medidas de seguridad y protección, el servicio debe ser medido por la calidad y solamente por la calidad.
Humildad y paciencia
Llegaba el turno del director de Inforesidencias.com. Josep de Martí razonaba que, para mejorar la situación actual, tanto el sector de la dependencia como la sociedad necesitan "humildad y paciencia para conocer bien la situación y no tomar decisiones drásticas". El modelo tanto de profesionales como de centros debe cambiar orientándose a las preferencias de las personas, con un incremento de profesionales en el sector, con mejores sueldos, un incremento del ratio por residente, mejora en la comunicación socio-sanitaria y un nuevo concepto de arquitectura en las residencias. "Hay que gastar más dinero", insistió.
Esto es más complicado de lo que parece, apuntaba, ya que los datos actuales indican que el 19% de la población española es mayor de 65 años y en unos años superaremos el 30%. De Martí hizo especial hincapié en que se deben estudiar a los centros que no han tenido afectados, hacer simulacros de manera periódica, promover la cultura del no contagio y establecer buenas prácticas para conseguir una óptima calidad del servicio independientemente de quién sea el prestador, por lo que la colaboración público-privada es necesaria.
También participó Antonio Amate como representante del sindicato Unión Sindical Obrera (USO). Así, el secretario general de FEUSO trasladó la situación en “shock” que estamos como sociedad. Además declaró que el ámbito público y privado deben cohabitar, más en este momento en el que necesitamos sumar fuerzas para afrontar el reto de superar la pandemia. Y concretamente, referenciando al sector de los profesionales de los Centros de Mayores en todas sus modalidades, apuntó la necesidad de reconocimiento a los trabajadores de residencias y no solamente a los sanitarios, además de dignificar y desarrollar una carrera profesional a los mencionados profesionales.
Por su parte, representando al Colegio Oficial de Psicología de España y también de Castilla y León, Jaime Gutiérrez incidió en la inédita situación que hemos vivido los españoles ya que es la primera vez que hemos tenido cadáveres sin velatorios por lo que además de los fallecidos, debemos atender postcrisis el duelo de las personas que han perdido a familiares. En el modelo de dependencia reclamó aumentar la financiación en la investigación, definiendo los roles del psicólogo en hospitales y en residencias; incorporar figura del psicólogo en atención primaria que es necesario y rentable (aumenta calidad de paciente, reduce cronificación de patologías).
También propuso modelos de atención individualizada en las personas; planes para prevención de la soledad de 4 millones de personas solas; terapia psicológica a los cuidadores principales y familias para atender a los mayores y dependientes para entender el nuevo comportamiento; prevenir con planes de envejecimiento activo. El papel de psicología va desde la historia de vida hasta los trastornos neurocognitivos, pasando programas emocionales y conductuales. En definitiva, desde el Colegio Oficial de Psicología apuestan por intervención de calidad desde una perspectiva biopsicosocial.
Cerró esta sesión inaugural el presidente del CEDDD, Albert Campabadal agradeciendo a todos los asistentes y ponentes su presencia; emplazando a desarrollar en otras futuras ponencias otros temas que también afectan al entorno de la persona mayor. El Consejo Sectorial CEDDD de Mayores y Dependencia, con las diferentes voces que lo integran, trabajará a lo largo del año mediante encuentros como el presente con el mismo propósito: luchar por la plenitud de derechos de estas personas y, por la adecuada intervención de las autoridades públicas y del conjunto de la Sociedad a través de un nuevo modelo de dependencia que asegure su salud y su bienestar.