Un tercio de los mayores de 75 años toma pastillas de más.
Para muchas personas mayores, el momento de las medicinas es una retahíla interminable de pastillas que, a tenor de un estudio hecho público recientemente, podría ser demasiado extensa.
El informe, publicado en la prestigiosa SA Medical Journal por tres investigadores británicos, recoge el estudio realizado sobre más de 1.800 pacientes mayores de 75 años. Sus indagaciones señalan que un tercio de los mayores estaban sobremedicados con pastillas que no necesitaban y que la media de pastillas que ingerían al día era de media docena.
En este sentido, los fármacos que más habitualmente aparecían prescritos figuraban analgésicos, antidepresivos, tranquilizantes, las aspirinas, el omeprazol y varios anticoagulantes.
Esta sobreprescripción deriva en una evidente incomodidad para los pacientes, que se ven esclavizados a un sinfín de pastillas a diario que no tendrían por qué tomar en condiciones normales, además del riesgo al que se les expone ante posibles efectos secundarios.
Sólo en Reino Unido, un país con una población de 64 millones de habitantes, 5 millones de ellos por encima de los 75 años, el estudio estima que el ahorro anual en fármacos rondaría los 4,5 millones de dólares.
Cuatro de cada cinco británicos toman una o más pastillas a diario, por lo que la representación demográfica que denuncia el estudio publicado es enorme. Es más, la sobreprescripción acaba representando entre el 5 y el 17 por ciento de los casos de ingresos hospitalarios vinculados a medicamentos en el Sistema Nacional de Salud de Reino Unido.