Las asociaciones empresariales GESCA, ELBE y LARES firmaron la semana pasada un acuerdo con los sindicatos en la Comisión Negociadora con el que ponían fin a un conflicto que afectaba a alrededor de 5.000 trabajadoras de las residencias de Vizcaya, principalmente gerocultoras, y que se extendía desde hace 20 meses con más de 360 jornadas de huelgas acumuladas.
La firma se ha logrado tras el preacuerdo logrado hace apenas un mes entre GESCA, y ELA, sindicato mayoritario del sector, pero que necesitaba la firma de las otras dos asociaciones empresariales, ya que GESCA solo representaba al 42% del sector.
El acuerdo recoge de una forma progresiva en el tiempo las principales reivindicaciones de los trabajadores y trabajadoras en cuanto a jornada y salarios, pasando el salario bruto de una gerocultora desde los 18.500 euros brutos actuales hasta los 20.400 euros brutos en 2020, lo que posibilitará que prácticamente todo el personal afectado alcance un salario neto de 1.200 euros por 14 pagas en dicho año.
Esto significa un incremento salarial de 140 euros mensuales, que se empezará a aplicar con efecto retroactivo desde la nómina de septiembre de este año, con una subida lineal mensual de 40 euros en 2017 y 2018; de 45 euros/mes en 2019; y de 55 euros/mes en 2020.
Menos horas
En cuanto a la jornada laboral, se acuerda una reducción progresiva de la jornada del convenio sectorial de casi 200 horas. De las actuales 1.698 horas de trabajo (de ellas, 15 para formación) se pasará a 1.517 horas (20 para formación). Logrando así las 35 horas semanales y el reconocimiento del “descanso del bocadillo” como tiempo de trabajo efectivo.
Además, se reconoce la no penalización económica en caso de accidente laboral o enfermedad profesional, percibiendo el 100% del salario en estos casos. También aumenta el plus de fin de semana (de 1,70 a 2,75 euros) y los pluses de nocturnidad.
Por otra parte, se mejora para las empresas la redacción de la cláusula de descuelgue actual para facilitar los acuerdos en aquellas que, por su situación excepcional, necesiten inaplicar el convenio colectivo temporalmente, sin que ello afecte negativamente a la concertación.
Todos contentos
Tras el acuerdo GESCA, ELBE y LARES han enviado un comunicado conjunto donde expresan su satisfacción por el acuerdo logrado, y para el que todos los agentes sociales involucrados -sindicatos y patronales- han tenido que ceder en sus planteamientos para hacerlo posible. “Ha sido necesario que las partes implicadas afrontaran la situación como una negociación de carácter laboral para que se haya podido rubricar este acuerdo, que posibilita la existencia de un convenio de eficacia general con la firma de todas las organizaciones empresariales. Asimismo, hay que agredecer a todas las partes el abandono de pretensiones maximalistas en aras de alcanzar un acuerdo satisfactorio”.
El acuerdo, según informan las asociaciones empresariales permite seguir garantizando el bienestar de las personas residentes y de sus familiares; mejorar las condiciones laborales de sus empleadas y empleados; y la sostenibilidad del sistema sin que esto suponga “cargas inasumibles para las más de 3.000 familias que sufragan de modo privado estas plazas, ni para la Diputación Foral de Bizkaia”.
Por su parte, las trabajadoras, a través de ELA, han emitido un comunicado en el que expresan su alegría por el acuerdo alcanzado poniendo así fin a un conflicto “duro y difícil… de mucho sufrimiento, muchas noches sin dormir y decenas y decenas de manifestaciones y concentraciones…Ha sido más que un conflicto laboral, también ha sido una lucha social y feminista, ya que hemos avanzado hacia la dignificación de los trabajos de cuidados”.